martes, 15 de septiembre de 2009

Escarabajo pelotero/ Dung beetle

Un día, caminando por la sierra de Cazorla, en Jaén, veo una bola casi perfecta rodar pendiente abajo de un camino y parece dotada de movimiento. Un escarabajo se encuentra a más de medio metro, pero la bola es localizada inmediatamente, se sube para seguir acumulando el fruto de su trabajo, el alimento con el que pasará el duro invierno. Vuelve a caer, pero con la cabeza boca abajo y empujando con sus patas traseras conseguirá desplazarla tras mucho esfuerzo a su destino. Toda una lección de constancia.

One day, walking through the Sierra de Cazorla, Jaén (Spain), I see a near perfect ball rolling down a trail slope and it seems endowed with movement. A beetle is far more than half a meter, but the ball is located immediately, it climbs to continue accumulating the fruits of their labor, which will feedit with the harsh winter. It falls again, but with the head upside down and pushing with his hind legs after much effort it will shift to its destination. A real lesson in perseverance.

1 comentario:

Amig@mi@ dijo...

Es alucinante los misterios que nos muestra la naturaleza, ¿verdad?
El instinto es algo tan indescifrable como fuerte, motor de tantas cosas...
Un abrazo